OPINION
UAG; CIERRES DE CAMPAÑA
Por Manuel Tello Zapata
Con los cierres de campaña que realizaron ayer los candidatos a rector de la Universidad Autónoma de Guerrero, Rogelio Ortega Martínez y Ascencio Villegas Arrizon, ambos frentes políticos mostraron nuevamente el músculo con miras a la elección de voto universal, libre y secreto, que se va a realizar el próximo viernes.
En Chilpancingo, el Gran Frente Universitario de Rogelio Ortega, reunió a cinco mil universitarios que marcharon por las principales avenidas para concluir su evento en la Plaza Cívica capitalina. En sus cierres realizados en Iguala y el puerto de Acapulco, el doctor Ascencio Villegas Arrizon reunió a casi doce mil simpatizantes. Si los cierres de campaña definieran la elección, Ascencio ya sería el rector desde ayer; pero son más de sesenta mil los universitarios con derecho al voto, por lo que la moneda sigue en el aire.
En la pista han quedado dos proyectos: el de Rogelio Ortega Martínez, quien presume ser doctor sin demostrarlo con documentos debidamente legalizados. Se trata de un proyecto que es de corte totalmente político y tiene todo el apoyo del Partido de la Revolución Democrática, que quiere volver a sentar sus reales en la UAG con su ideología del siglo pasado. El otro es un proyecto académico y de desarrollo institucional, que el doctor Ascencio Villegas Arrizon ya firmó ante notario público.
El proyecto político de Rogelio Ortega pretende colocar a la Universidad nuevamente en esos tiempos de confrontación permanente y actividad política izquierdista, que no respeta la pluralidad política de los universitarios. Basta con ver quiénes acompañan a este candidato, para saber por dónde mueve la cola esa iguana. Promete cosas que no se pueden cumplir, como el del pase automático de quienes egresen de las preparatorias, a las escuelas de Educación Superior; ofrece beneficios a los trabajadores, que carecen de sustento financiero desde ahora.
Si este proyecto ganara la Rectoría, dentro de cuatro años los universitarios sufrirían la decepción de que esa nueva universidad que hoy promete el Gran Frente Universitario sólo fue un ardid electoral para ganar votos, porque no hay presupuesto que alcance para lograr un auténtico cambio.
El proyecto que impulsa Ascencio Villegas por lo contrario, busca continuar elevando los parámetros e indicadores de calidad académica que en estos cuatro años alcanzaron niveles que tienen el reconocimiento de la propia Secretaría de Educación Pública. Busca mantener buenas relaciones de respeto mutuo con los tres niveles de gobierno, ante quienes gestionará los recursos que mejoren realmente a la universidad, sin hacer falsas promesas para ganar el voto.
manueltello2002@yahoo.com
UAG; CIERRES DE CAMPAÑA
Por Manuel Tello Zapata
Con los cierres de campaña que realizaron ayer los candidatos a rector de la Universidad Autónoma de Guerrero, Rogelio Ortega Martínez y Ascencio Villegas Arrizon, ambos frentes políticos mostraron nuevamente el músculo con miras a la elección de voto universal, libre y secreto, que se va a realizar el próximo viernes.
En Chilpancingo, el Gran Frente Universitario de Rogelio Ortega, reunió a cinco mil universitarios que marcharon por las principales avenidas para concluir su evento en la Plaza Cívica capitalina. En sus cierres realizados en Iguala y el puerto de Acapulco, el doctor Ascencio Villegas Arrizon reunió a casi doce mil simpatizantes. Si los cierres de campaña definieran la elección, Ascencio ya sería el rector desde ayer; pero son más de sesenta mil los universitarios con derecho al voto, por lo que la moneda sigue en el aire.
En la pista han quedado dos proyectos: el de Rogelio Ortega Martínez, quien presume ser doctor sin demostrarlo con documentos debidamente legalizados. Se trata de un proyecto que es de corte totalmente político y tiene todo el apoyo del Partido de la Revolución Democrática, que quiere volver a sentar sus reales en la UAG con su ideología del siglo pasado. El otro es un proyecto académico y de desarrollo institucional, que el doctor Ascencio Villegas Arrizon ya firmó ante notario público.
El proyecto político de Rogelio Ortega pretende colocar a la Universidad nuevamente en esos tiempos de confrontación permanente y actividad política izquierdista, que no respeta la pluralidad política de los universitarios. Basta con ver quiénes acompañan a este candidato, para saber por dónde mueve la cola esa iguana. Promete cosas que no se pueden cumplir, como el del pase automático de quienes egresen de las preparatorias, a las escuelas de Educación Superior; ofrece beneficios a los trabajadores, que carecen de sustento financiero desde ahora.
Si este proyecto ganara la Rectoría, dentro de cuatro años los universitarios sufrirían la decepción de que esa nueva universidad que hoy promete el Gran Frente Universitario sólo fue un ardid electoral para ganar votos, porque no hay presupuesto que alcance para lograr un auténtico cambio.
El proyecto que impulsa Ascencio Villegas por lo contrario, busca continuar elevando los parámetros e indicadores de calidad académica que en estos cuatro años alcanzaron niveles que tienen el reconocimiento de la propia Secretaría de Educación Pública. Busca mantener buenas relaciones de respeto mutuo con los tres niveles de gobierno, ante quienes gestionará los recursos que mejoren realmente a la universidad, sin hacer falsas promesas para ganar el voto.
manueltello2002@yahoo.com
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