Un habano en seis minutos
A simple vista, puede parecer que estas manos tienen poco de especial. Pero pertenecen a una de las mejores torcedoras de puro del mundo. Inocencia Baltelemi tiene 48 años y desde hace 25 pone alma y corazón en su oficio.
Siempre ha trabajado en el Taller manual de la fábrica Cohiba en La Habana con mucho esfuerzo, ha conseguido llegar a ser jefa de torcido de esta empresa de referencia que sigue trabajando como antiguamente. Mientras lían tienen una lectora que lee libros y disponen de tiempo para escuchar música y hasta para ver la novela. Capitanea un equipo de 84 personas, de las cuales 55 son mujeres. Su velocidad es de récord. En ocho horas es capaz de hacer de forma totalmente manual 75 puros Cohiba BHK de vitola 56.
Y no son meras palabras. Los fumadores más incrédulos pudieron comprobar en el estanco del número 12 de la calle Jaime III de Palma su destreza. En apenas seis minutos es capaz de hacer uno. Hubo quien se quedó ojiplático. También quien disfruto descubriendo la manera en la que se elaboran los puros más deseados. Es la primera vez que está en España, aunque no es novata enseñando sus habilidades. Ya ha pasado por Alemania y los teutones quedaron igual de fascinados que aquí.
Aunque no reconoce tener ninguna aptitud especial en la materia, lo cierto es que pronto llegó a convertirse en torcedora de 9ª categoría, un lugar privilegiado al que sólo tienen acceso los mejores, los encargados de la elaboración de los puros de más calidad, los que tienen las normas más complicadas. En las categorías inferiores se elaboran los más pequeños, que no siempre son necesariamente los más fáciles de hacer.
De hecho, para Inocencia, cuanto más finos, la dificultad es mucho mayor. "Los más complicados de elaborar son los lanceros, porque son los más finos. Tienes que intentar que no quede sesgado ni duro. Los más gruesos son más fáciles", asevera. Por partes reconoce que lo más complicado es la tripa. "Tienes que estar muy derecha", advierte. Mientras que lo más fácil es la capa, a la que denominan "la ropa del tabaco".
Sin embargo, si le preguntas qué características debe tener un buen torcedor de puros lo tiene claro. La habilidad la pone uno mismo. Cada cual tiene más facilidades con un tipo de tabaco que con otro, porque cada uno tiene su secreto a la hora de liarlo. Las exigencias de calidad son máximas en Cohiba. Hasta tal punto que si no lo hacen bien, no cobran. "Quizás por eso sean los mejores", afirma.
A pesar de todo esto, reconoce no haber fumado jamás.
No hay comentarios:
Publicar un comentario