No se crean con el nuevo organigrama puestos como pago político, rechaza Rogelio Ortega
Karina Contreras
El secretario general de la Universidad Autónoma de Guerrero (UAG), Rogelio Ortega Martínez, reconoció que al ampliar la estructura de la administración aumentará la nómina de 3 a 5 por ciento, pero que eso ya está previsto dentro del presupuesto que se va ejercer este año.
Reconoció que aumenta un poco, “no tiene uno porqué obviar que toda reforma para que funcione mejor la universidad, la actual distinta a la diez años, por supuesto que aumenta, pero está perfectamente analizado el impacto que esto tendrá en la nómina y no nos saca de lo que está presupuestado para ejercerse en el rubro de la administración central”.
Descartó que la creación de nuevos puestos sea para cubrir las cuotas a las corrientes políticas que apoyaron en la candidatura única al ahora rector Javier Saldaña Almazán, pues “no es el objetivo principal, el objetivo es tener una administración que responda a la universidad de hoy y al nuevo modelo que queremos impulsar de regionalización de la educación superior, detonar el posgrado y la investigación”.
Ortega Martínez fue entrevistado en el Instituto Internacional de Estudios Políticos Avanzados Ignacio Manuel Altamirano (IIEPA-IMA) de la UAG, donde acudió para presenciar la defensa de una tesis de doctorado. El secretario general dijo que con la nueva estructura administrativa se trata de adecuar el gobierno universitario “a la nueva realidad que se vive”.
El funcionario universitario comentó que el modelo vigente hasta el jueves, luego de que aprobó las reformas el Consejo Universitario, ya tenía diez años y se detectó que algunas direcciones no funcionaban como se habían programado, como se había supuesto, como se había aprobado el modelo y los realizados en la pasada sesión de consejo eran cambios necesarios, obvios y urgentes.
“Entonces este nuevo modelo que arrancará con el nuevo gobierno universitario es para mejora de la institución. Por supuesto que la universidad de hoy es distinta a la de hace diez años, entonces necesitamos una mayor participación de profesionales con perfil y con capacidades suficiente para que vengan a apoyar el trabajo del rector”, dijo Ortega Martínez.
Ortega Martínez dijo que los cambios se dieron en la dirección integradora de la funciones sustantivas de la universidad, “que no integraba nada, cada quien seguía funcionando por su lado; la función de investigación, que es sustantiva para la universidad, era un puesto periférico subordinado; el posgrado maginado, por lo que se crea la dirección general de posgrado e investigación; se crea la dirección general de docencia y la dirección general de extensión universitaria, son las sustancias de la universidad y se habían convertido en instancias periféricas”.
Sobre si la ampliación del aparato burocrático de la universidad no se podría tomar como una forma de crear puestos para cubrir el pago político a las corrientes que apoyaron la candidatura única de Javier Saldaña, Ortega Martínez subrayó que ese no es el objetivo sino tener una administración que responda a la universidad y aseguró que el modelo nuevo, como el anterior, se acomoda para cubrir los espacios y que el problema es cuando un grupo reclama más de lo que tiene de presencia en la universidad.
Añadió que la regionalización obliga a que se tenga que crecer un poco en lo administrativo, pero con una administración plural, representativa no por cuotas sino por perfiles. Sobre cuánto representa en dinero ese aumento del 3 o 5 por ciento de la nómina, el secretario general Rogelio Ortega dijo que no tenía el dato, pero que en dos semanas la dirección general de finanzas, que antes se llamaba dirección general de gestión de los recursos estratégicos de la Universidad, podrá dar un dato específico al respecto.
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