martes, 24 de agosto de 2010

La política educativa no es ni adecuada ni pertinente, afirman directores de la UAG
Kau Sirenio Pioquinto/Chilpancingo
La política educativa no es ni adecuada ni pertinente, además segrega a muchos estudiantes que no tienen la posibilidad de pagar sus estudios, lo que prácticamente los deja en la calle sin posibilidad de alcanzar una vida digna, afirmaron los directores de las unidades académicas de Ingeniería y Filosofía y Letras, de la Universidad Autónoma de Guerrero (UAG).
Los universitarios agregaron que con ello se corre un alto riesgo de que los rechazados se inserten en la delincuencia organizada y todo porque el gobierno federal y estatal no asignan mayor presupuesto a la educación.
Entrevistados por separado en Ciudad Universitaria, el director de la Unidad Académica de Filosofía y Letras de la UAG, Justino García Téllez, autor del libro Lo ético y lo político en Morelos, y el director de la escuela de Ingeniería, Juan Carlos Medina Martínez, coincidieron que el gobierno no ha sido capaz en garantizar la educación de los jóvenes guerrerenses, lo que pone en peligro el desarrollo del estado.
El director de Filosofía y Letras señaló que la política educativa es discriminatoria, porque cierra la puerta a jóvenes que aspiran estudiar algunas de las licenciaturas universitarias y todo porque no se asigna mayor presupuesto a la UAG.
“No hay presupuesto suficiente en la universidad, por eso en muchas de las unidades académicas hay rechazados, aquí los principales afectados son los jóvenes; en muchos de los casos no es que se rechace a los muchachos, sino que no hay forma de ubicarlos, en el caso de Filosofía y Letras no tenemos suficientes aulas, además nos piden una matrícula de 35 alumnos por grupo, con lo que prácticamente nos ahogan”, explicó.
Agregó además que “el día en que el gobierno tome a la educación como una política de estado, y que vea a la educación como motor de desarrollo, ese día lograremos combatir verdaderamente el problema de la delincuencia organizada”.
El director de Ingeniería, Juan Carlos Medina Martínez, dijo que la falta de infraestructura y la disminución de matrícula para lograr la certificación del plantel, provocó que fueran rechazados aspirantes Sistemas Computacionales, Construcción y Civil.
“Hace falta infraestructura, como aulas, butacas, pizarrones y dinero, además de la falta de maestros para las distintas licenciaturas, pero también el Centro de Investigación de Educación Superior (CIES) pide que para acreditar la licenciatura se tienen que disminuir la matrícula, nos piden un número de 35 alumnos por grupo, cuando la demanda es superior”.
Añadió que en cada proceso de selección se ha encontrado que los aspirantes presentan bajo rendimiento en matemática, español, ciencias sociales y naturales, “en este años se detectó que los aspirantes no lograron una puntuación aceptable, cuando deberían de aprobar lo básico”.

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